Capítulo 2: Un giro en mi vida.

Capítulo 2: Un giro en mi vida.

(Narra Sarah)

Nos sentamos en uno de los bancos que había. No había nadie en el parque, al menos en aquella zona...
Escuché algunos gritos y gente hablando. Me giré y habían cinco chicos. Uno de ellos me miraba... ¡Dios mío! ¿One Direction? No... No puede ser. Creía que me estaba empezando a obsesionar y ahora los vería en todas partes... Pero no, ¡eran ellos! Allí estaban, los cinco, sentados en el césped...

Harry se dio cuenta de que les estaba observando y apartó su mirada corriendo. Era imposible que fueran ellos... Pero sí, eran ellos y estaban allí, justo a nuestro lado.

-Alice, mira aquellos chicos que están sentados en el césped, pero por favor, no grites.
-¿Qué pasa? -abrió sus ojos como platos al verlos. Corriendo la tapé la boca con mi mano para que no gritara.
-No, no. No grites... -le dije a Alice que intentaba quitarme la mano- Si no gritas, te quito la mano... -Asintió con la cabeza y le quité la mano despacio.
-Sarah... ¿Son ellos? ¿De verdad? Haber, pellízcame -dijo extendiendo su brazo cerrando los ojos.
-Sí. Increíble, pero cierto.
-¿Podemos acercarnos? Quiero conocerlos... es mi sueño.
-Vamos.

Nos acercarnos a ellos, despacio, con miedo. ¿Nos ignorarían? ¿Se irían en cuánto supieran que éramos fans? Los chicos se dieron cuenta de que nos estábamos acercando y se levantaron. Alice me agarró del brazo, fuerte, me empezaba a doler.

-Hola -sonreí.
-¡Hola! -dijo Louis.
-Alice... -dije dándole pequeños golpes en el hombro- ¡Alice, Alice, reacciona! Es una gran fan vuestra...
-Sarah, Sarah, son ellos... -dijo Alice agarrándome de los hombros.
-Sí. Vamos, Alice, no pierdas esta oportunidad. Cumple tu sueño. Los tienes a menos de dos metros.
-¿Pu... Puedo... Abrazaros? -preguntó tartamudeando.
-¡Claro! -dijeron los chicos al unísono.

Alice se lanzó a ellos. Abrazó a todos, uno por uno. Se hicieron fotos, le firmaron autógrafos... Alice cumplió su sueño. Estaba feliz y yo también, de verla a ella.

No dejaba de mirar a Harry... Era ¿precioso?, ¿Fantástico?, ¿Increíble? Como decirlo... ¡Perfecto! Sí, perfecto. Estaba nerviosa. Tenía a One Direction delante de mis narices y no hacía nada. Estaba a un lado, viendo aquella escena, viendo como se abrazaban y Alice se emocionaba. Muchísimas chicas le hubiera gustado haber estado en mi lugar. Conocerlos. Chicas que los seguían desde hace muchísimo tiempo y aún no lo habían conocido y yo... Qué solo los conocía de un día, ya los había conocido...

Harry vio que estaba a un lado, sonriendo como una tonta, mirando. Se acercó a mí, con esa perfecta sonrisa que sólo tenía él. Me extendió su mano diciéndome 'Ven con nosotros. No te quedes ahí parada' Sonreí. No sabía que decir... Solo agarré su mano y me acerqué a los demás chicos, que todavía seguían hablando con Alice. Nos sentamos todos en círculo y estuvimos conociéndonos.

-Y bueno, ¿cómo os llamáis? -preguntó Niall.
-Alice.
-Qué nombre más bonito -sonrió Niall guiñándole un ojo.
-Gracias... -dijo Alice tímida.
-¿Y tú como te llamas? -me preguntó Harry.
-Sarah -sonreí.

Estuvimos un rato más hablando. Riendo con locuras que hacían y decían los chicos. De repente empezó a sonar 'Your Song' de Elton John. Mi móvil empezó a sonar, ¿quién podría ser? Cogí corriendo el móvil, ¿mi madre? Descolgué. Me preguntó que tal estaba, como me lo estaba pasando, y todas esas típicas preguntas que hacían las madres y hablé un poco con mi hermana. Hablé en español, obviamente. Harry no dejaba de mirarme... Y Niall creo que me entendía. Terminé de hablar y volví a dónde estaba sentada junto a los demás.

-Lo siento, chicos, era mi madre.
-¿Por qué has hablado en español? -preguntó Niall.
-Porque soy Española.
-¡¿De verdad?! -preguntaron los chicos a la vez.
-Sí... -reí tímida.
-Yo voy mucho a España -dijo Niall sonriente.
-¿Dónde sueles ir?
-Suelo ir los veranos a Marbella.
-¿Marbella? ¿Málaga? Yo soy de Sevilla, cerca de Málaga -sonreí- Ya me parecía a mí que me entendías cuando hablaba...
-Sí, algo sé.
-Me gustaría quedar más con vosotras. Sois muy simpáticas -dijo Zayn.
-¿Sí, verdad? -dijo Liam.
-¡Por mi encantada, eh! -rió Alice.
-Nos encantaría estar más tiempo con ustedes... Pero es algo tarde... -dijo Louis.
-Yo quiero quedarme más tiempo con ellas -sonrió Harry.
-Buenos... Pues entonces nos vamos nosotros, ya nos veremos chicas -dijo Liam despidiéndose de nosotras.

Nos despedimos de los demás chicos, excepto de Harry, que se quedó con nosotras. Aunque Alice también decidió irse. Dijo que sus padres seguro que la estarían esperando... Sí, me dejó a solas con Harry... Estaba muy nerviosa, no podía hablar, solo sonreía...

-¿Así que eres española, no?
-Sí -sonreí a lo bajo.
-Me gustan las españolas.
-¡Me vas a sacar los colores, Harry! -reí.
-¡Es la verdad! -rió- Quiero saber más sobre ti... ¿Cuántos años tienes? ¿Qué te gusta hacer?
-Tengo dieciocho años, recién cumplidos -sonreí- ¿Qué me gusta hacer? Bailar. Me encanta bailar. Háblame ahora sobre ti. No sé nada de ti, solo lo básico.
-Vaya... Es la primera vez, desde que soy famoso, que una chica, me dice que le hable sobre mi... Todas saben cómo soy. Me resulta raro...
-Normal... Yo no os conozco a ninguno. Ayer os escuché por primera vez.
-Pero me gusta.
-¿Te gusta? ¿Qué no sepa nada de ti?
-Sí. Bueno, me gusta porque la mayoría me tratan y me quieren por el 'Harry Styles' famoso, cantante, componente de One Direction, pelo rizado, ojos verdes... Y no como el verdadero 'Harry' chico de dieciocho años, de Holmes Chapel...
-Entiendo... No sabes de que van.
-Exacto. ¿Vamos a tomar algo? ¿Un chocolate caliente? ¿Un café?
-Sí, claro -sonreí.
-¿Qué te parece si tomamos algo y te llevo a un sitio?
-¿A dónde?
-No suelo llevar a nadie... Pero no sé, quiero que seas la primera. Suelo ir mucho, para relajarme, allí estoy solo, no me persiguen ni me gritan...
-Vale, vamos -sonreí.

Llegamos a un Starbucks. Harry se compró un chocolate caliente y yo un café. Subimos a la planta de arriba, no había nadie. Así estaríamos los dos tranquilos... y solos.

Me olvidé de todo. Harry hizo que me olvidase de todo. Me lo estaba pasando genial. Era el chico perfecto. Con el que podías hablar sobre cualquier tema... Podía confiar en él. Nunca me imaginé que me pasaría esto, es increíble. Vi a Harry subir las escaleras con el chocolate caliente y el café en las manos. Qué sonrisa más preciosa, que ojazos, que rizos... Que... Que perfecto.

-Gracias -sonreí.
-No las des -sonrió- ¿Y cómo que estás aquí en Londres?
-Desde pequeña he querido venir a Londres, era mi sueño. Siempre le decía a mis padres, 'cuando cumpla los dieciocho iré a Londres'. He estado ahorrando mucho para poder venir... Y aquí estoy.
-Hiciste bien.
-Sí -sonreí a lo bajo.

Terminamos de tomarnos nuestra bebida, salimos de aquel Starbucks y nos dirigimos a aquel sitio dónde me quería llevar Harry. Quería que fuera la primera persona que entrara a aquel sitio... ¿Qué sería? Estaba intrigada por saber que era. Al llegar entramos en una especie de garaje. Había una mesa en el centro, con un gran sofá y un equipo de música... Era como un salón.

-Vaya, que grande es esto. Es perfecto para bailar...
-Yo suelo venir a cantar, como dije antes, a pasar el rato solo y tranquilo -rió- Ven, siéntate en el sofá.

Me senté y el puso música. ¿Qué iba a hacer? Esa música... la había escuchado ya antes... ¿What Makes You Beautiful? Sí, What Makes You Beautiful. Se sentó a mi lado, y empezó a cantar. No me lo podía creer... ¿Cantándome? Con esa perfecta voz. Me miraba fijamente con esos ojazos verdes, agarrándome de las manos. Terminó de cantar y le abracé. Todo lo que hizo fue precioso, increíble, perfecto... Tanto como él.